SUBJETIVIDADES ESPACIALES EN PLAZA DE LA HOJA DESDE LOS ESTUDIOS CULTURALES.
La propuesta planteada en este trabajo pretende tener un enfoque multidimensional, centrado en tres aspectos que evidencian cada uno la importancia de la investigación, en primer lugar, acogiendo la categoría de subjetividades espaciales se pretende entender no sólo la parte social y emocional de las personas que están en condición de desplazamiento, sino que se pretende entender cómo estos sujetos son "reconstruidos" por el espacio en la transformación de sus prácticas cotidianas y como ellos así mismo significan dicho espacio; es importante incluir el análisis de los componentes psicosocial y emocional dentro de la investigación ya que desde las diferentes experiencias vividas y el impacto que estas tuvieron, se pueden entender la posibilidad de la repetición de acciones violentas por parte de las personas que en algún momento fueron en sí mismas víctimas, o por otro lado la posibilidad de resiliencia.
Además de esto, es importante entender en diferentes escalas como se vieron afectadas, en una primera escala de manera individual, los traumas que pueden sufrir, cómo los diferentes hechos que vivieron cambiaron sus proyectos de vida, las sensaciones de inseguridad, dolor o incluso venganza que pueden sentirse.
Posteriormente en una escala familiar, en el caso de pérdida de miembros de la familia, cómo han llevado a cabo su duelo, si pudieron hacerlo o no, esto puede significar un cambio en las dinámicas familiares e incluso como se plantea en los lineamientos para la atención de población desplazada por violencia de 1999, cómo se pudieron ver cambiados los roles dentro de la familia. Posteriormente en una tercera escala, de existir una comunidad que hubiera sido desplazada y que aún en su reubicación continúa unida de alguna forma, cómo son las nuevas relaciones de esta comunidad y si desarrollan trabajos entre ellos para recuperar lo que perdieron.
Cada una de las escalas anteriores representa en sí misma una relación específica con los espacios, tanto los espacios abandonados, como los nuevos espacios receptores. Creo que las personas que están en condición de desplazamiento atraviesan necesariamente por un proceso de transformación de sus prácticas cotidianas, lo que a mi modo de ver también implica tener que llevar a cabo una apropiación del nuevo espacio al que llegan, esto es, hacer ciertas concesiones con las cuales se lleva a cabo tanto una hibridación social, como también una hibridación socio-espacial.
Esta hibridación permite que las personas que se están resituando incorporen dentro de su vida cotidiana prácticas de ese nuevo lugar de asentamiento, entendiendo que se incluyen tanto elementos sociales, como elementos físicos en tanto un cambio en la morfología del espacio. Sin embargo, esta hibridación no sucede en un sentido único y lineal, por el contrario, sucede de manera recíproca con mayor o menor intensidad en ciertos aspectos; con lo anterior me refiero a que esta población resituada, trae consigo un sinnúmero de saberes, modelos y lógicas que también entrarán a hacer parte de un modelo de vida y de habitar hegemónicos. La relación entre el sujeto y el espacio es innegable en la medida en que citando a Francisco Javier Franco Silva
“el hombre es, hace, está, tiene y comunica, en el espacio; intercala y se confronta socialmente, en el espacio; por tanto, es definitivamente espacial. En tal sentido, las estrategias concebidas, ejecutadas e inscritas en el cuerpo cultural del hombre, están dadas en un lugar específico que, junto a las condiciones sociales y culturales del entorno, contribuye a definirlas, caracterizarlas y dotarlas de un significado, dentro de su sistema simbólico en las condiciones específicas de dicho lugar. Por tanto, tiene un contenido determinado localmente. “el ser sería entonces el lugar del habitar, y la casa, un terreno que el hombre se apropia para manifestar su ser”(Franco, 1996 p,9)
Lo anterior me lleva a hablar del segundo aspecto que debe ser tenido en cuenta, el sitio particular en el cual se propone desarrollar este trabajo. El Proyecto VIP Plaza de la hoja plantea nuevos retos frente a la investigación en la medida en que las condiciones del proyecto son completamente diferentes a las que presentan la mayoría de comunidades desplazadas que vive en aquello denominado "la informalidad" (entiéndase informalidad en cuanto a su trabajo, y la forma en como han desarrollado sus asentamientos) En el caso de los habitantes de plaza de la hoja, las edificaciones fueron construidas con el único propósito de ser un proyecto de VIP destinado particularmente a familias en condición de desplazamiento y víctimas del conflicto armado, esto ya implica de por sí un cambio en Cómo las personas en condición de desplazamiento asumen el espacio. Por un lado hay que entender las nuevas relaciones espaciales de las personas de la comunidad con sus nuevos espacios, hay que tener presente que seguramente la morfología, la tipología de la vivienda, el programa arquitectónico, el planteamiento urbano, entre otros serán completamente diferentes a los espacios en los que las personas inicialmente vivían; esto implica en conjunto con lo planteado anteriormente tanto sobre la apropiación del espacio como la hibridación que las relaciones sujeto-espacio pueden estar ligadas a los factores psicosociales y emocionales de las personas, por lo cual los diferentes espacios que fueron diseñados en Plaza de la hoja son a su vez contenedor y contenido de nuevos proyectos de vida.
La arquitectura del proyecto juega otro papel importante en este segundo aspecto; hay que identificar cómo, con qué características y con qué intenciones se diseñó cada espacio, entender que como arquitectos estamos más allá de responder a unas necesidades básicas o a unos índices mínimos de habitabilidad, tenemos la responsabilidad de generar espacios que tengan un impacto positivo en las sensaciones de las personas, y en el caso de trabajar con diseño para comunidades en condición de desplazamiento es imperativo que la población se vea identificada y representada en los espacios.
Siguiendo la línea espacial, me permito dar paso al tercer aspecto general a tener en cuenta en la importancia de esta investigación. Este trabajo busca aportar en alguna medida al entendimiento del espacio como constructor y articulador de la sociedad, esto es, que el proceso de diseño del espacio no sólo está íntimamente ligado al aspecto emocional de quien o quienes lo diseñan, también está íntimamente ligado a las sensaciones que se quieren producir con un determinado espacio y para ello es fundamental tener en cuenta a quienes habitarán el espacio y lo que ellxs quieren sentir y percibir cuando estén allí puesto que la arquitectura influye en las personas que la habitan. Además de esto, el estudio de un proyecto piloto como Plaza de la hoja abre la puerta para llevar a cabo un proceso de desmitificación en cuanto a las divisiones socio-político-económico-espaciales con las cuales la sociedad colombiana y en particular el desarrollo urbanístico ha reproducido lógicas segregacionistas.
POR QUÉ PLAZA DE LA HOJA?
El proyecto Plaza de la hoja fue construido entre los años 2014 y 2015 como una propuesta alternativa a los planteamientos que usualmente se desarrollan como proyectos VIP. En primer lugar, la ubicación ha sido blanco constante de críticas al estar emplazado dentro de un sector central de la ciudad (Cra 30 con Calle 19), ya que por lo general se piensa que las viviendas VIP y VIS deben estar ubicadas en la periferia de la ciudad, sumado a esto, la sectorización por estratos con la que se "organiza" la ciudad también ha llevado a que se piense que tener un proyecto VIP en in sector de estrato medio podría desencadenar el deterioro del sector y la desvalorización del mismo. Para dar un panorama general de lo que implica en términos económicos la ubicación del proyecto recalco que en el sector el metro cuadrado cuesta alrededor de 3 millones de pesos. En el caso de las VIP el valor máximo de acuerdo al Ministerio de Vivienda no puede superar los 70 SMLV y en caso de ser VIS no puede superar los 135 SMLV, es decir, 48´261.780 y 93´076.290 respectivamente. Teniendo en cuenta que las unidades de vivienda entregadas en el proyecto son de 50mts2 el valor total de ellas sería de alrededor de 150´000.000. por lo cual no "deberían" ser consideradas como VIP y VIS.
Más allá de las cifras, es importante entender que Plaza de la hoja es un proyecto hasta ahora único en su especie en esta ciudad y que, por sus características, presenta un gran reto para la sociedad en general, tanto para las familias que llegaron a vivir en él, como para las personas que ya vivían en el sector y que tienen diferentes puntos de vista sobre el proyecto y sus nuevos vecinos.
Las transformaciones sociales que trae consigo un proyecto de este tipo pueden verse en la medida en que hay una formación de nuevas relaciones para cada una de las personas, los conflictos no sólo pueden presentarse entre los habitantes de Plaza de la hoja con los habitantes del barrio Cundinamarca, sino que pueden presentarse conflictos dentro del mismo proyecto.
Para el año 2015, Plaza de la hoja ya albergaba a 1.464 personas, alrededor de 457 familias todas reconocidas como víctimas del conflicto armado, por lo cual pudieron acceder a estas viviendas. Es importante tener claro que, en su mayoría, estas familias están en un proceso de pasar de la "informalidad" a "formalidad" hablando en términos tanto de vivienda como de trabajo, por lo que es un momento esencial para entender cómo se está produciendo este cambio y qué tipo de interacciones se están desarrollando entre estas familias y sus nuevas viviendas.
Para poder comprender estas relaciones es necesario establecer diferentes momentos de análisis; en primer lugar, entender las formas de relación y apropiación que tienen las familias con este nuevo espacio, a partir de esto analizar el impacto que el nuevo entorno ha tenido en ellos y por último, analizar de qué manera se ha modificado la memoria espacial del lugar del cual fueron desplazados.
Plaza de la hoja presenta un escenario poco común y poco estudiado, ya que las relaciones espaciales y de hábitat no se dan por procesos de "invasión", como suele ocurrir en la periferia de la ciudad, lo cual implica que muy seguramente las formas de apropiación y de interacción con el espacio tampoco serán las mismas, esto también representa un nuevo campo de estudio para quienes estamos interesados en trabajar la dimensión del sujeto ligado a los espacios enmarcados en el tema del desplazamiento, añadiendo por supuesto un nuevo contexto sobre el cual trabajar, la construcción de sujeto en un escenario poco común y con nuevas dinámicas espaciales y sociales.